¿Qué es el seguro de caución?

 

El seguro de caución –también conocido como seguro de garantía– es un producto a través del cual, el asegurador, se obliga a indemnizar al asegurado en aquellos casos en los que, el tomador del seguro, incumpla con sus obligaciones legales o contractuales.

Este tipo de seguro tiene lugar cuando una de las partes de un contrato exige a la otra una garantía para responder del cumplimiento de sus obligaciones. De hecho, se trata de una modalidad de seguro muy habitual en los contratos con la Administración Pública, aunque se utiliza en muchos otros casos.

Dadas las diferencias entre el tipo de obligaciones posibles a garantizar, existen también distintas modalidades de seguro de caución como, por ejemplo:

  • Garantías de licitación o ejecución a favor de la Administración.
  • Garantías de distinto tipo a favor de un privado.
  • Afianzamiento de cantidades anticipadas en la construcción y venta de vivienda.
  • Póliza en garantía de las obligaciones contraídas ante las autoridades aduaneras.

La ventaja del seguro de caución para el tomador del seguro es el hecho de que le permite no consumir su capacidad crediticia; algo que no sería posible si tuviera que aportar una fianza o aval, como garantía de sus obligaciones. En su lugar, tan sólo ha de pagar la prima de la póliza del seguro.

Por último, cabe señalar que, todo pago hecho por el asegurador, deberá serle reembolsado por el tomador del seguro en caso de siniestro.

 

Algunas diferencias entre los seguros de crédito y caución

 

Para comprender la utilidad de ambos seguros y saber cuándo contratar uno u otro, voy a indicarte una serie de diferencias clave.
  • El seguro de caución está cubriendo el riesgo de incumplimiento; mientras que el seguro de crédito cubre el riesgo de insolvencia definitiva del deudor.
  • El seguro de caución nace de la obligación de ofrecer una garantía de cumplimiento de determinadas obligaciones; mientras que el seguro de crédito nace de la voluntad del tomador de protegerse frente al impago de sus deudores.
  • En el seguro de crédito, el asegurado es el propio tomador del seguro; mientras que en el seguro de caución, el asegurado es la contraparte de una relación contractual.

¿Cuándo tu empresa debe contratar un seguro de caución?

 

El seguro de caución es la herramienta más útil que tiene una empresa para cubrir sus necesidades legales o contractuales de afianzamiento.

En lugar de aportar un aval bancario, o cualquier otro tipo de garantía, basta con pagar la prima de la póliza del seguro de caución. De esa forma, se liberan recursos financieros que poder destinar al desarrollo y expansión del negocio.

Existen muchos tipos de garantías que tu empresa puede estar obligada a prestar, dependiendo de su actividad:

  • Garantía de contrato, ya sea para mantener la seriedad de oferta, o cumplir con las contraprestaciones.
  • Garantía aduanera, exigida por la Administración de Aduanas, para asegurar el pago de la deuda tributaria.
  • Garantías ante organismos agrícolas.
  • Garantía de acopios y de sustitución de retenciones.
  • Seguro de afianzamiento para la compra de viviendas, mediante el que se garantiza al comprador de un inmueble el reembolso de su anticipo, si dicho inmueble no es finalmente entregado.

GARANTÍA DE ADUANAS

 

Descripción

Por Garantías ante Aduanas (Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de la Agencia Estatal de Administración Tributaria) se entiende la cobertura que asegura ante esta Administración Pública el pago debido por las empresas importadoras de los aranceles correspondientes a importaciones de bienes.

Tipologías

a) Depósito aduanero:
El seguro cubre las responsabilidades establecidas en el artículo 101 del Código
Aduanero Comunitario que son garantizar las mercancías durante su estancia en el depósito aduanero, ejecutar las obligaciones que resulten del almacenamiento de las mercancías, las condiciones particulares fijadas en la autorización y el pago de los aranceles de las mercancías que salgan del depósito aduanero.

b) Importaciones temporales:
Se trata de seguros ante la Autoridad Aduanera para mercancías importadas que deben estar un periodo de tiempo en el territorio importador a la espera de
exportación.

c) Levante de mercancías:
La Autoridad Aduanera requiere estas garantías en las operaciones de importación para asegurar el pago del impuesto al que debe hacer frente quien recoge la mercancía en el lugar de llegada. Con dicho seguro, puede retirar la mercancía sin haber realizado el correspondiente pago.

d) Régimen de perfeccionamiento de activo (RPA):
Garantizan el tránsito de mercancías que entran en España, donde permanecen durante un determinado período de tiempo, durante el cual son transformadas y posteriormente exportadas.

Requisitos mínimos de contratación

– 300 mil euros de fondos propios.
– Un millón de euros de facturación.
– Antigüedad de tres años.

Documentación necesaria

– Cuentas oficiales (auditadas en el caso de que auditen y también las
consolidadas en el caso de que consoliden).
– Avance provisional.
– Modelo 347 o en su defecto detalle de sus principales clientes.
– Importe requerido y dependencia de aduana a la que se tiene que presentar