LOS RETRASOS EN LOS PAGOS DESCIENDEN EN ASIA
Coface ha realizado una encuesta sobre el comportamiento de pagos de las empresas en Asia entre noviembre de 2022 y abril de 2023, que proporciona una visión general sobre la evolución del comportamiento de pago y las prácticas de gestión de crédito de alrededor de 2.300 empresas en la región de Asia Pacífico. Las empresas que participaron en la encuesta operan en nueve mercados (Australia, China, Hong Kong, India, Japón, Malasia, Singapur, Taiwán y Tailandia) y operan en 13 sectores.
La encuesta revela que, en general, ha descendido el número de empresas que experimentaron retrasos en los pagos en 2022. De hecho, descendió hasta el 57% -el nivel más bajo de los últimos 10 años-, frente al 64% de 2021. No obstante, la duración de estos retrasos en los pagos en la región Asia-Pacífico ha aumentado considerablemente, ya que las empresas se han vuelto más restrictivas en lo que respecta a las condiciones de crédito, en un contexto de tipos de interés significativamente más altos, condiciones financieras más estrictas y alta inflación. Como resultado, los retrasos han pasado de una media de 54 días en 2021, a 67 días.
A nivel sectorial, siete de los trece sectores encuestados reportaron mayores retrasos medios en los pagos. Los pagos atrasados aumentaron más en los sectores minorista (+15 días), farmacéutico (+10,5 días) y energético (+10 días). Los sectores de la energía y la construcción registraron el mayor retraso medio en los pagos, con 77 días. Por otro lado, el sector agroalimentario y textil registró el menor retraso, con un descenso de 60 días en 2021 a 52 días en 2022.
Según la experiencia de Coface, el 80% de los retrasos de pago ultralargos (ULPD) de más de 6 meses nunca se pagan, pudiendo poner en peligro la tesorería de las empresas, cuando estos constituyen más del 2% de su facturación anual.
La encuesta pone de manifiesto una disminución en la proporción de encuestados que experimentan ULPD superiores al 2% de su facturación anual, disminuyendo del 34% en 2021 al 26% en 2022. A pesar de la mejora en la mayoría de los países asiáticos, la situación en Australia es diferente, ya que la proporción de encuestados que se enfrentan a ULPD ha aumentado de un ya alto 56% en 2021 a un 63% en 2022. Malasia también experimentó un aumento del riesgo de flujo de caja, con un porcentaje de ULPD que ha pasado del 0% de los encuestados en 2021 al 26%. En general, la situación podría deteriorarse en los próximos meses, ya que las quiebras empresariales ya han aumentado en Japón, Corea, Australia, Hong Kong y la India en el primer semestre de 2023.
El 39% de los encuestados señaló que el aumento del precio de las materias primas fue el factor que más afectó a sus ventas y su flujo de caja en 2022. Otros factores fueron las interrupciones del negocio debidas a las medidas de confinamiento, que provocaron una escasez de mano de obra (27%) y un descenso de la demanda (20%). Se espera que los elevados precios de las materias primas, sobre todo la energía, los tipos de interés elevados y las estrictas condiciones financieras, así como la debilidad de la demanda comercial mundial, frenen la actividad empresarial en 2023.
Las perspectivas para 2023 parecen más positivas, ya que el 77% de los encuestados espera que el crecimiento económico mejore en 2023. Las empresas de la India y Tailandia fueron las economías más optimistas, con un 92% (+9,4 puntos porcentuales desde 2021) y un 86% (+5,6) de los encuestados que prevén un mayor crecimiento. Las empresas de Hong Kong y China, donde no se levantaron las restricciones hasta finales de 2022, expresaron más confianza en un mayor crecimiento económico para 2023, con un aumento de 23,7 ptos. hasta el 77% en el primer caso y de 16,3 ptos. hasta el 84% en el segundo.
«Esta encuesta pone de relieve una mejora de las condiciones de pago para las empresas asiáticas en 2022. Sin embargo, la continua guerra en Ucrania, la creciente rivalidad tecnológica entre EE. UU. y China, la débil demanda en los mercados de EE. UU. y Europa, la persistente alta inflación y las importantes subidas de tipos que han contribuido al endurecimiento de las condiciones monetarias y financieras seguirán pesando sobre los consumidores y las empresas asiáticas en 2023. Por lo tanto, Coface prevé que el crecimiento económico en Asia se acelere sólo ligeramente, hasta el 4,5% en 2023», comenta Bernard Aw, Economista para Asia-Pacífico de Coface.
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Fuente: COFACE
