La ciberdelincuencia mueve tanto dinero como la pornografía y el tráfico de drogas juntos

No solo es un limitador de la libertad, la ciberseguridad afecta a la economía y al orden mundial.

Actualmente la principal motivación de los ciberdelincuentes es el dinero, como os hemos comentado que ocurre con el robo de contraseñas o el phising. Son muchas las variables que se usan para obtener dinero de los usuarios poco informados.

Es por ello que se sigue investigando la ética que se esconde en estos actos, para poder separar los que son genuinos y los que ocultan otras motivaciones. Es interesante saber a qué estamos dispuestos a renunciar por la supuesta seguridad de un mundo conectado

Nadie quiere renunciar a los avances tecnológicos

Estamos inmersos en la Cuarta Revolución Industrial o Industria 4.0. Este punto reconoce la tendencia actual de automatización y el intercambio de datos que incluye los robótica, domótica, el Internet de las cosas o la computación en la nube entre otras cosas.

Estos avances en la industria nos llegan a nuestro día a día en diferentes formas, normalmente como agentes que nos facilitan la vida, ahorros en el consumo o mejoran la seguridad. Y por estar tan implicados en nuestra vida, la ciberseguridad debe ser un esfuerzo de todos.

Ya que los ciberataques afectan a nuestra libertad. Las soluciones que pueden dar los gobierno pueden privarnos de libertades. Como ejemplo sirva el Social Credit System, un sistema mediante el cual el Gobierno chino da y quita puntos a los ciudadanos por cuestiones como cruzar un semáforo en rojo, todo ello a través de un control por cámaras de seguridad.

Paralelamente se han desarrollado otros programas como el analizar las caras de las personas para detectar posibles delincuentes. Todo ello respaldado por un supuesto criterio de seguridad. Pero ¿todos queremos perder la privacidad y ceder libertades por esa seguridad?

Fake News otra forma de ciberguerra

La nueva guerra, ciberguerra, tiene una modalidad conocida por todos, las Fake News, una formula para orientar a la opinión pública. No es contar una mentira o crear sentimientos a favor o en contra de algo, si no directamente orientarnos hacia un pensamiento concreto.

Hoy en día, la política se debate en las redes sociales. Estos espacios no son de debate si no de autoafirmación, ya que solo se escucha las opiniones con las que se está de acuerdo, por lo que nos vamos convirtiendo en personas cerradas e intolerantes.

Conclusiones

Y es que las personas somos tanto parte del problema como de la solución. La concienciación es un pilar de esta sociedad. Por ello todos hemos de tener precauciones y hábitos tecnológicos que nos permitan afrontar este nuevo escenario.

En este sentido, las empresas como Hiscox, aseguradora de ciberriesgos para la empresa, ha comenzado a desarrollar una Academia en la que la formación es tan importante como la prevención. Estos son los ejemplos a seguir y también, los recursos a aprovechar.

 

Fuente: Tiempo Seguro