TERCERA NOTA INFORMATIVA SOBRE LA ACTIVIDAD DEL CONSORCIO DE COMPENSACIÓN DE SEGUROS (CCS) CON OCASIÓN DE LAS INUNDACIONES PRODUCIDAS EN AMPLIAS ZONAS DE LA PENÍNSULA POR LA DANA DE 1 A 4 DE SEPTIEMBRE DE 2023
En el periodo de 1 a 4 de septiembre de 2023 se han producido precipitaciones intensas y persistentes asociadas a una depresión aislada en niveles altos (DANA) que han generado inundaciones en amplias zonas de la península ibérica.
1.- Una vez ha sido posible realizar el reconocimiento pericial de aquellas zonas que inicialmente no eran accesibles (vgr: vías cortadas) y a la vista del ritmo de recepción de solicitudes de indemnización de la primera semana, el CCS ha actualizado su primera estimación, muy preliminar y orientativa, de los daños asegurados, que en estos momentos ya se sitúa en el entorno de 17.000 siniestros de inundación con coste de entre 100 y 115 millones de euros. Esta estimación actualizada es también provisional y susceptible de variación conforme avance la gestión de las peritaciones.
2.- A 13 de septiembre de 2023, el CCS ha recibido 12.363 solicitudes de indemnización, de las que destacan 7.173 que corresponden a la provincia de Toledo, 243 a la de Cuenca y 217 a la de Ciudad Real; 2.905 a la provincia de Madrid; 501 a la de Valencia; 440 a la de Tarragona; y 191 procedentes de Segovia. Hay otras numerosas provincias en las que se han producido menos daños y de menor severidad.
En concreto, y por lo que respecta a Toledo, destaca el muy elevado número de localidades que han sufrido daños importantes. Así, hasta el momento, el CCS ha recibido entre 400 y 800 solicitudes de indemnización de la capital de la provincia y de los municipios de Casarrubios del Monte, Magán, Mocejón, Villaluenga de La Sagra y Yuncler. Se han recibido entre 100 y 200 solicitudes de momento de los municipios de Olías del Rey, Chozas de Canales, El Viso de San Juan, Recas, Santa Cruz del Retamar, Escalona, Cobeja, Camarena, Yunclillos y Fuensalida.
En Ciudad Real, las solicitudes de indemnización se concentran especialmente en Tomelloso (175 solicitudes); y en Cuenca, la localidad de Buenache de Alarcón ha resultado muy severamente dañada (136 solicitudes).
En la provincia de Madrid, además de la capital, destacan El Álamo, Villamanta, Villanueva de Perales y Navalcarnero (entre 200 y 500 solicitudes recibidas de cada una de las localidades citadas); de Valdemorillo, Villamantilla y San Lorenzo de El Escorial se han recibido hasta el momento entre 75 y 100 solicitudes de indemnización.
En la de Segovia, destaca El Espinar (165 solicitudes).
Por su parte, en Valencia el mayor número de las solicitudes recibidas proceden de Torrent (173) y de Silla (78).
En la provincia de Tarragona, las solicitudes proceden especialmente de Alcanar (200 solicitudes por ahora), Santa Bárbara (83 solicitudes) y Amposta (52).
3.- Por tipo de bien inundado, las citadas 12.363 solicitudes de indemnización se refieren a 8.007 viviendas y comunidades de propietarios de viviendas (el 65% de las solicitudes recibidas); 3.337 vehículos automóviles (27% del total recibidas); 854 establecimientos comerciales, oficinas y otros inmuebles, públicos o privados, de uso no industrial (que representan el 7% de las solicitudes hasta ahora recibidas); 160 industrias y 5 obras civiles (1% restante).
4.- Las 12.363 solicitudes de indemnización se han recibido a través de la web del CCS (www.consorseguros.es) en el 61% de las ocasiones y mediante llamada al CAT del CCS (teléfono gratuito 900 222 665) en el 39% de los casos.
Han sido los asegurados quienes en el 45% de los casos han solicitado la indemnización del CCS; lo han hecho, en su representación, las entidades aseguradoras en el 30% de las ocasiones; y los mediadores (agentes o corredores) de seguros han presentado la solicitud el 25% restante de los casos.
El CCS ha ampliado hasta 80 operadores la plataforma telefónica del CAT y la mantiene operativa sábados y domingos mientras continúe el fuerte ritmo de llamadas.
Simultáneamente, el CCS ha activado un buzón para que, en caso de saturación, el asegurado pueda dejar su número de teléfono. El domingo 10 de septiembre la plataforma telefónica ha comenzado a emitir llamadas a aquellos asegurados que dejaron constancia de su número de teléfono en el citado buzón, para solicitarles los datos necesarios para registrar informáticamente sus solicitudes de indemnización.
5.- Se recuerda a los asegurados, para su tranquilidad, que el CCS gestiona todas las solicitudes de indemnización que se le presentan, aun cuando hubiera transcurrido el plazo de 7 días previsto, con carácter general, en la Ley de Contrato de Seguro. Las circunstancias que concurren en desastres naturales que afectan a miles o decenas de miles de asegurados, como ocurre en este caso, desaconsejan o hacen imposible ajustarse al mencionado plazo.
6.- El equipo inicial de 154 peritos del CCS se ha ampliado hasta 196 y está desplazado en las zonas afectadas, y está contactando con los asegurados y realizando las visitas a los riesgos dañados. Se han presentado, dentro de los diez siguientes a la ocurrencia de la inundación, los primeros informes periciales de daños de sencilla valoración, de forma que el CCS ya ha realizado los primeros pagos a asegurados por transferencia bancaria. A partir de esta semana, el CCS irá incrementando progresivamente cada semana el nivel de pagos en concepto de indemnización.
7.- También se recuerda a los asegurados que el CCS abonará el importe de todos los daños que sean indemnizables con arreglo a los capitales y conceptos asegurados y las cláusulas que consten en sus contratos de seguro, cualquiera que sea el importe que alcancen, sin que las cifras estimativas de coste económico a cargo del CCS que se indican en el número 1 de esta nota -o que se pudieran señalar en futuras comunicaciones- representen un límite cuantitativo a la indemnización a pagar por el CCS.
8.- En el caso de vehículos es muy aconsejable para facilitar la peritación que, al solicitar la indemnización, se identifique con claridad al CCS el lugar en el que se encuentra el vehículo y, en su caso, el taller de reparación (nombre, dirección y teléfono).
El CCS indemnizará los daños causados cualquiera que sea la cobertura del seguro que hubiera contratado el afectado. En definitiva, es suficiente con tener contratada la cobertura del seguro obligatorio de daños a terceros para tener derecho a una indemnización del CCS en el caso de daños en los vehículos causados por riesgos extraordinarios como las inundaciones.
La indemnización incluirá el coste de transporte del vehículo al taller para su examen y reparación en el que, en su caso, se hubiese incurrido.
9.- Para facilitar la labor pericial es esencial que el asegurado muestre al perito el contrato de seguro, con sus suplementos y actualizaciones si existieran, sobre la base del cual el CCS y su perito deben calcular la indemnización que corresponda. Debe recordarse que el CCS, en su condición de entidad aseguradora pública, no concede ayudas ni subvenciones públicas, sino que abona indemnizaciones derivadas del contrato de seguro que tuviera concertado el afectado con su entidad aseguradora.
Precisamente por ese motivo los asegurados afectados por la inundación pueden dirigirse al CCS de forma inmediata sin necesidad de esperar a que se produzca, en su caso, una declaración de “Zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil” (conocida coloquialmente como “zona catastrófica”). La eventual declaración que se pudiera producir en tal sentido no afecta de forma alguna a la actividad de valoración de daños y pago de indemnizaciones a los afectados que estuvieran asegurados.
10.- El asegurado que ha solicitado la indemnización puede realizar determinadas actuaciones encaminadas a recuperar progresivamente la normalidad sin necesidad de esperar a que el perito del CCS contacte con él. Es muy importante que, al mismo tiempo, en el caso de que el asegurado deba desprenderse de objetos dañados, realice fotos y vídeos que pueda mostrar al perito. Igualmente importante es que, si hubiese encargado o incluso realizado reparaciones o sustituciones, conserve los presupuestos y las facturas para mostrarlas al perito como evidencias de los daños –siempre imprescindibles para que éste pueda desarrollar su función valorativa-.
