Los 4 riesgos a medio y largo plazo que afrontan las empresas europeas

FERMA ha publicado su primer informe sobre tendencias en la gerencia de riesgos Next, que advierte que el pensamiento cortoplacista y los sesgos cognitivos a todos los niveles están dejando a empresas y gobiernos en una situación de alta vulnerabilidad ante los impactos generalizados y duraderos de las tendencias de riesgos emergentes, como los cambios geopolíticos y el cambio climático.

 

Elaborado por el Comité de Prospectiva de FERMA, el Informe Next destaca diversas barreras sistémicas dentro de las organizaciones y los gobiernos que dificultan la gestión de riesgos a largo plazo, lo que lleva a enfoques reactivos en lugar de proactivos. Estas barreras incluyen la priorización de las ganancias inmediatas sobre la resiliencia futura, impulsada por múltiples factores, como las presiones del mercado, las restricciones regulatorias y las prioridades operativas.

 

Según el informe, la economía del comportamiento, incluyendo sesgos como el del statu quo, el del optimismo y el del pensamiento colectivo, también contribuye a la resistencia al cambio, así como a una sobreestimación de la capacidad de las empresas para gestionar el riesgo y a una tendencia a priorizar el consenso sobre la evaluación crítica: «Todo ello refuerza el enfoque organizacional a corto plazo», señala la asociación.

 

Basándose en la perspectiva de expertos de un amplio espectro de campos, tanto dentro como fuera del ámbito de la gestión de riesgos, el informe identifica cuatro riesgos a medio y largo plazo con el mayor potencial para perturbar las empresas europeas. Estos son:

 

  1. Cambios geopolíticos: Las importantes transformaciones en el panorama político mundial están generando altos niveles de incertidumbre e inestabilidad que afectarán al comercio, la inversión y las cadenas de suministro.
  2. Aceleración tecnológica: Los rápidos avances en tecnologías como la IA, la automatización y la biotecnología están revolucionando las empresas y la sociedad, pero también generan riesgos como la pérdida de empleos, dilemas éticos y la reducción de la competitividad europea.
  3. Capital humano: Atraer, desarrollar y retener el talento es cada vez más difícil, y se complica aún más por la evolución de los requisitos de competencias y las cambiantes expectativas de los empleados.
  4. Cambio climático: Un clima cambiante presenta importantes riesgos para las empresas, el sector asegurador y la sociedad, a la vez que aumenta la probabilidad de acciones legales contra las empresas en la UE.

 

En este contexto volátil y disruptivo, el informe enfatiza que los gerentes de riesgos deben establecer un horizonte de riesgo a largo plazo dentro de sus organizaciones y contrarrestar activamente los sesgos cognitivos para fortalecer la resiliencia tanto a nivel empresarial como social. El informe propone varias estrategias complementarias para desarrollar marcos de riesgo que aborden los riesgos emergentes.

 

En el centro de esto se encuentra la adopción de un enfoque de previsión estratégica, que permita a las empresas ampliar su horizonte de riesgo. Este enfoque implica la aplicación de técnicas como la planificación de escenarios, la exploración del horizonte y la rueda del futuro, un método utilizado para comprender el posible efecto dominó de tendencias específicas. Estas herramientas ayudan a las organizaciones a explorar cómo los riesgos pueden evolucionar e interactuar en diversas circunstancias.

 

Otras técnicas descritas en el informe incluyen el fomento de una cultura de pensamiento a largo plazo para promover la gestión proactiva de riesgos; la redefinición de las métricas de rendimiento para incorporar medidas de resiliencia y adaptación; y el aprovechamiento de tecnologías como el análisis basado en IA y los modelos predictivos. El estudio también anima a las organizaciones a adoptar un enfoque más holístico para reconocer mejor la naturaleza cada vez más interconectada e interdependiente del riesgo. Además, al identificar los factores clave que influyen en cada una de estas tendencias a largo plazo, permite a los gestores de riesgos desarrollar escenarios creíbles adaptados a la dinámica específica de sus respectivas organizaciones.

 

En relación con el informe, Philippe Cotelle, miembro de la Junta Directiva de FERMA y presidente del Comité de Prospectiva, añadió: «Los gestores de riesgos son plenamente conscientes de las limitaciones derivadas del pensamiento a corto plazo y de un enfoque limitado en los riesgos conocidos, pero a menudo carecen de las capacidades o el apoyo necesarios para abordar las amenazas emergentes. A través del Informe Next, FERMA ha identificado los principales riesgos a medio y largo plazo que enfrentan las organizaciones europeas y ha proporcionado una serie de metodologías y herramientas de prospectiva estratégica que pueden combinarse para superar estas limitaciones y contribuir a construir una cultura de pensamiento a largo plazo para gestionar los desafíos interconectados y complejos de un horizonte de riesgo en constante cambio. El objetivo de FERMA es posicionar a los gestores de riesgos como líderes en prospectiva y facilitadores de oportunidades estratégicas».

 

Charlotte Hedemark, presidenta de FERMA, añadió: «Por su naturaleza, los riesgos emergentes ofrecen tiempo suficiente a las empresas para identificar, monitorear y mitigar las amenazas asociadas. Sin embargo, el cortoplacismo y los sesgos cognitivos arraigados en la toma de decisiones corporativas y gubernamentales implican que seguimos sin estar preparados para estas exposiciones de alta probabilidad y gran impacto. Es fundamental que las empresas e instituciones adopten un enfoque más proactivo y a largo plazo».