La actualización de Crowdstrike causa un fallo global en sistemas de Microsoft, afectando a aerolíneas, hospitales y más sectores críticos

 

Una actualización del software de seguridad de CrowdStrike ha provocado una interrupción global en los sistemas de Microsoft, paralizando operaciones en diversas empresas y dejando en tierra a cientos de aviones. En España, el fallo ha afectado significativamente a aeropuertos, hospitales y otras infraestructuras críticas, causando retrasos y complicaciones.

 

El problema, originado por una incompatibilidad entre una actualización de CrowdStrike y los sistemas Windows, ha obligado a muchas empresas a recurrir a métodos manuales para mantener sus operaciones. Aeropuertos como los de Madrid-Barajas, Barcelona, Sevilla y Alicante han experimentado largas filas y procedimientos manuales para el check-in y la facturación, lo que ha generado retrasos generalizados.

 

CrowdStrike ha identificado el origen del problema y ha distribuido una solución. Los usuarios deben eliminar manualmente un archivo específico de la actualización reciente, un proceso que debe realizarse equipo por equipo. Esto supone un desafío considerable para grandes empresas con miles de dispositivos afectados.

 

George Kuntz, fundador de CrowdStrike, aseguró en la red social X que «los sistemas Mac y Linux no están afectados» y que el incidente no es un ciberataque, sino una incompatibilidad técnica. «Se ha implementado una solución, pero requiere intervención manual, lo que complicará la resolución completa en grandes organizaciones», explicó Rafael López, experto en ciberseguridad de Perception Point.

 

El equipo de Microsoft 365 está llevando a cabo acciones adicionales para mitigar el impacto y restaurar la funcionalidad y disponibilidad de los sistemas afectados. Microsoft trabaja en redirigir el tráfico a sistemas alternativos para aliviar el impacto de manera más eficiente.

 

En los aeropuertos españoles, la situación se hizo evidente alrededor de las seis de la mañana, cuando comenzó el flujo de vuelos hacia Barajas. Aena, la entidad gestora de aeropuertos en España, reportó que los sistemas de facturación y puntos de información al pasajero se vieron afectados, lo que provocó retrasos en vuelos de Iberia, aunque no se registraron cancelaciones.

 

El problema se extendió a otros países, afectando a aeropuertos en Berlín, Ámsterdam-Schiphol y Zúrich, entre otros. En algunos casos, como en Edimburgo, se cancelaron varios vuelos. Las aerolíneas Ryanair y Wizz Air también reportaron problemas significativos.

 

En España, además de los aeropuertos, el fallo ha afectado a empresas como Repsol y Osakidetza. Algunas estaciones de servicio tuvieron dificultades para procesar pagos. Sin embargo, los servicios sanitarios españoles solo se vieron afectados parcialmente, principalmente aquellos que utilizan tecnología de CrowdStrike.

 

El fallo también ha causado caos en otros países. En Australia, los sistemas cibernéticos se vieron interrumpidos, afectando desde supermercados hasta aeropuertos y servicios de transporte como Uber. En Israel, se reportaron fallos en hospitales y servicios de emergencia.

 

En el Reino Unido, bancos, trenes y la sanidad pública fueron los más afectados. La Bolsa de Londres y Sky News también sufrieron interrupciones. En Alemania, una clínica universitaria canceló todas las cirugías electivas programadas para el día.

 

Las acciones de CrowdStrike y Microsoft cayeron significativamente en la bolsa tras los problemas informáticos. CrowdStrike, especializada en ciberseguridad, vio una caída de casi el 14% en sus acciones, mientras que Microsoft descendió un 3%.

 

Este incidente destaca la vulnerabilidad de los sistemas interconectados y la importancia de las actualizaciones de software en la estabilidad de las operaciones críticas. La solución manual del problema, aunque efectiva, tomará tiempo para implementarse completamente, lo que prolongará el impacto en numerosas empresas y servicios esenciales.